Las situaciones de conflicto son parte natural de la vida escolar y también oportunidades para realizar aprendizajes sociales. En la convivencia todos aprendemos valores y el accionar de los adultos constituye un modelo alternativo de conducta a seguir. Por ello, es fundamental, que nosotros docentes, ante situaciones de conflicto, tengamos en cuenta:
- Mantener la calma y el control de las emociones, dado que las reacciones frente al conflicto también educan.
- Tomarse tiempo para pensar la estrategia a seguir. Pensar con otros sirve para clarificar lo que sentimos y pensamos.
- Poner en claro las emociones. Cuando se utilizan palabras se disminuye el potencial de violencia de cualquier conflicto.
- Reflexionar. El análisis de la conducta que ha provocado el conflicto debe ser llevada a cabo por el alumno, con la guía y orientación del docente
- Asumir la responsabilidad. Es el que provocó el conflicto quien mejor sabe por qué sucedió y el único que puede estar en condiciones de repararlo.
Acontinuación te presentamos un Proyecto interinstitucional denominado "Aulas para el desarrollo personal y social"
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